La localización al servicio de los eventos globales

Con la apertura de los Juegos de Invierno en Pekín, es emocionante comprobar cómo los grandes eventos internacionales vuelven a recuperar paulatinamente algo parecido a la vieja normalidad. En el que ya es el tercer año de la pandemia, no cabe subestimar la dificultad de celebrar este tipo de eventos, y es casi inevitable la gran atención que se está prestando a las medidas de seguridad que rodean el evento. Sin embargo, y anteponiendo la importancia decisiva de todas las cuestiones relacionadas con la salud y la seguridad, queremos recordar aquí que no son el único componente esencial para el éxito de un acontecimiento de esta talla.

La localización es un aspecto clave que, aunque sucede en un discreto segundo plano, garantiza que grandes acontecimientos como los Juegos de Invierno transcurran sin problemas. Al fin y al cabo, estos Juegos convocan a deportistas y espectadores de todo el mundo, y reúnen un gran número de lenguas y de culturas para la celebración del deporte a escala mundial. Y siempre que se reúne una gran comunidad internacional, no puede haber comunicación sin localización. 

De hecho, la localización influye en la organización y la coordinación de este tipo de eventos en un grado que puede resultarle sorprendente. A continuación, descubriremos algunas de las formas en las que los servicios de localización sustentan grandes acontecimientos como los Juegos de Invierno, y también explicaremos por qué una buena localización es la clave del éxito (o el fracaso) de un evento. 

Seguridad e instalaciones

Es esencial que las instalaciones garanticen siempre una experiencia excelente para todos los asistentes, sin importar de qué tipo sean: desde una sencilla sala de reuniones hasta una red de emplazamientos repartidos por toda la ciudad. Invitados, espectadores y periodistas recorrerán esos espacios, y todos deben poder orientarse con facilidad, una tarea nada sencilla cuando esos visitantes proceden de una gran variedad de países y culturas. Por ello, la localización es fundamental para la experiencia de los asistentes. 

En principio, puede parecer una simple cuestión de traducir carteles y mapas; sin embargo, es un proceso mucho más complicado y con muchas más implicaciones. Hay que diseñar cuidadosamente todos y cada uno de los textos de instrucciones o comunicación que estén presentes en las instalaciones, y ese diseño debe tener por objetivo transmitir simultáneamente el mensaje deseado en un gran número de idiomas y para culturas muy diferentes, que interpretan expresiones, colores y símbolos de forma propia. En función del tipo y de la naturaleza del evento, puede que la cartelería deba ser efectiva tanto en chino (que utiliza sinogramas) como en árabe (que se lee de derecha a izquierda). Unos ligeros cambios en el texto o el diseño de una señal pueden facilitar enormemente la capacidad para entender y seguir unas indicaciones. 

En el contexto actual de crisis sanitaria a escala planetaria, es todavía más importante esta capacidad de transmitir información de forma clara. Con la pandemia, las instrucciones se han vuelto más complicadas, ya que es posible que grupos distintos tengan que compartir espacios o transitar lugares comunes sin coincidir físicamente, para evitar contagios. También es más importante que nunca que se sigan al pie de la letra las medidas de distancia interpersonal. Tanto es así que solo se necesita un error de interpretación para poner en peligro todo un evento. En este sentido, la localización puede desempeñar un papel crucial para mejorar la comunicación y reducir este riesgo. 

Participantes e interpretación 

Antes incluso de llegar al evento en sí, los invitados y participantes de otros países necesitan un entorno que les resulte cómodo y acogedor, y la comunicación es clave para conseguirlo. Si los participantes reciben toda la información que necesitan en un idioma y en un formato que les resulten propios, podrán ofrecer el entretenimiento, los resultados o las perspectivas para que el acontecimiento sea digno de recuerdo y todo un éxito. 

Este proceso puede comenzar meses antes de la celebración. Por ejemplo, se puede despertar el entusiasmo por el evento a través de documentación localizada, desde información sobre el hotel o la asistencia en el aeropuerto hasta los mensajes de correo electrónico previos a la salida y paquetes de bienvenida con información sobre el destino y la ocasión. Este tipo de materiales son una muestra de cuidado y de respeto por los participantes, que va más allá de una simple traducción. 

En los eventos internacionales, también es muy beneficioso proporcionar servicios de interpretación para los asistentes de otros países. Un buen intérprete se ocupará de eliminar muchas de las dificultades que supone asistir a un evento en un lugar diferente, y conseguirá que los invitados puedan disfrutar de su estancia. Al igual que muchos otros servicios lingüísticos en estos eventos internacionales, los intérpretes suelen quedar en un discreto segundo plano, pero son una pieza fundamental de todo el engranaje. Sin ellos, sería fácil que un gran evento internacional pudiera acabar condenado al fracaso.  

La ciudad y el mensaje

En eventos como los Juegos de Invierno, las necesidades vinculadas a la localización son aún mayores. Se trata de grandes acontecimientos que suponen una inversión de miles de millones de dólares para mejorar infraestructuras, modernizar instalaciones o lanzar campañas de marketing para la ciudad y para todo el país.

Como es natural, esto requiere un gran trabajo de localización, especialmente porque los resultados del evento pueden repercutir en la imagen de la ciudad durante décadas. Así, por ejemplo, las infraestructuras deben adoptar nuevos diseños que aporten beneficios a la población local, pero que también sean fáciles de utilizar para personas de otros países. Hay que grabar anuncios, actualizar señales, traducir menús… y cada tarea de localización contribuye a que la experiencia sea inolvidable para el conjunto de los asistentes.

Al final, los estudios sugieren que los eventos internacionales como estos Juegos de Invierno desempeñan un papel decisivo en la imagen de marca de una ciudad, y recomiendan que los organizadores los conciban como una campaña de marca. Como en toda campaña publicitaria global, la localización sirve para transformar tanto el contenido como el mensaje en algo que tenga repercusión más allá de las fronteras culturales. Al convertir el evento en un mensaje sencillo, emotivo e inolvidable, la localización tiene un efecto transformador no solo en eventos mundiales, sino en los lugares donde se celebran.

Más allá del evento

La localización tiene una gran repercusión en eventos como los Juegos de Invierno. Y es así por una razón sencilla: si lo que se quiere es ofrecer una experiencia sobresaliente para un público internacional, debe tenerse en cuenta hasta el más mínimo detalle.

Lo mismo ocurre con cualquier otra campaña de marketing. Tanto si está en el comité de organización de uno de los mayores eventos del mundo como si tan solo quiere añadir otro idioma a su sitio web, la traducción solo es el primer paso. Es la localización la que le ayudará a desplegar todo su potencial, y a captar y deleitar al público con contenidos a su medida.

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